un millón de cosas y ojos hinchados

no sé qué me pasó el viernes, pero estuve convalesciente desde la tarde y la recompensa fue el tener los ojos hinchados el sábado. pude bajarlos a tiempo para el pentecostés, el teatro y la super fiesta del buen kluz. me la pasé muy bien y fui muy valiente porque no llevé ropa interior. no sé dónde representa más mérito: si al ir a una celebración cristiana o a una fiesta de mi amigo más guadalupano.

+ junio 3 a las 21 hrs.
++ amargo silencio en la sala experimental.

hubo de todo este fin de semana: avivamiento, plegarias, promesas, cotorreo, hinchazón, nuevos planes, teatro, gente nueva y antibióticos. el viernes me seguí sintiendo mal y un poco basurita, sin embargo compré regalos envueltos para todos. el sábado por fin conocí al alter ego del buen kluz cumpleañero, pero no platiqué demasiado porque tuve que correr con mi tarjeta de crédito para hablar y pagar el cable y el interné antes de que se venciera. platiqué un mediano con chuy hasta que lo psicoanalizaron y un otro mediano con el primo parkouriento. creo que esta vez no hablé de teatro, aunque sí les platiqué que me caí y me ensucié los antenudillos o antefalanges. además, fui taaaan valiente o bueno, quizá me super curé de los males de amores que me aquejaban el año pasado. el vacuno de mi ex se plantó en la fiesta y, aunque rato después se me vinieron a la cabeza estadísticas, me pareció que está completamente drenado de mi cabeza y el corazón. al menos no fui la única que apreció semejante cosa, porque yo tmb me senté un poco en el diván de la hermana de kluz y, por medio de un fácil examen verbal y dibujólogo, llegamos a la conclusión que ni las buenas noches se merecía el peladito. je, esta penúltima frase se oyó muy vaquera-del-tec.

también me di cuenta que vi más obras de teatro de las que hubiera deseado ver, pero estuvo bien después de todo. ahora estoy súper pobre, pero con una obra en puerta para dentro de tres semanas. ya no veo venir el día en que me toque descansar o ir a patinar... hace tiempo que no lo hago. lo único señorial que hice este fin de semana fue hacer el super, pero ni siquiera he desifnectado mis vegetales. he sido muy mala ama de casa para mí misma, jo... pero me he sacado mucho a passssiiiaaar.

creo que mi mamá tiene un crush numerísitico y celestial. eso es algo bueno y bonito, espero que le guste el duro; digo, que le dure el gusto porque han pasado casi diez años sin interesarse en algo que no sea un pensamiento filosófico. bueno, esta infatuación tampoco es por una persona real sino por un exnovio que no sabemos si está vivo o muerto... pero ah, cómo nos entretiene formular teorías sin usar el método científico.

este blog es corto porque hay un millón de cosas qué hacer. extrañé escribir este fin de semana, así como extraño dormir.